jueves, 24 de enero de 2013

I'm always fucking fine.

Cuando hace un par de días escribí que este año iba a ser accidentado, no tenía idea de lo acertada que iba a ser esa afirmación. Enero definitivamente no es mi mejor mes, nunca lo fue pero este en particular es una patada al hígado.
Perdí gente. No, reformulo. Acepté la pérdida de gente, porque internamente yo sabía, pero me negaba rotundamente a pensar que estaba rodeada de gente a la cual yo mucho no les importaba, o quizás no como a mi me gustaría.
Siempre pensé que eso era una boludez, lo de "necesito que me ames como yo te amo", y al día de hoy la creo, porque hay muchas formas de amar; pero lo que no creo que sea boludez es pensar que necesito que me amen con la misma intensidad con la que amo, porque yo me hago la linda, la fuerte, la que no me importa, pero soy una pelotuda por dentro, soy de esas personas que se entregan por las relaciones, que lo dejan todo, y si, necesito que dejen todo por mi.
Necesito sentir que la otra persona tiene tanto miedo de perderme como yo de perderla. Yo peleo por aquellas personas que amo y quiero en mi vida, y la peleo a muerte, pero este año me agarró cansada, derrotada. No puedo sostener amistades sola, es una relación de dos, no puedo estar yo sola interesada, o yo sola sosteniéndola, o yo sola adaptándome. No puedo yo sola.

Así que si, estoy bajando los brazos, estoy corriendo a sabiendas que nadie va a intentar frenarme.

No hay comentarios:

Publicar un comentario